Autor: Megan Maxwell
Nº páginas: 477
Editorial: Esencia
Branon Sivon, dueño del prestigioso bufete de abogados Sivon-Cardigan de Nueva York, adora a su hija, Sharon, a quien ha ido preparando desde pequeña para que se haga cargo del negocio familiar cuando él falte. Sin embargo, Branon fallece inesperadamente, y Sharon, lejos de sentirse capaz de tomar las riendas del bufete, debe afrontar otro duro revés cuando encuentra una antigua foto suya junto a una niña que se le parece mucho.
Todas sus sospechas quedan resueltas cuando descubre una caja con un diario y los recibos bancarios de unos ingresos que su padre había estado haciendo a una entidad desde la misma fecha en la que ella nació. De este modo averigua que ella es adoptada y que la otra niña es su hermana.
Anibal, su prometido, intenta que la noticia no salga a la luz, ya que si el gabinete jurídico para el que trabaja se entera de que Sharon no es la hija biológica del magnate Branon Sivon y de Adela Cardigan, todas sus aspiraciones políticas se irán al traste. Pero Sharon necesita respuestas, por lo que iniciará un viaje durante el que, además de reencontrarse con su hermana melliza y con sus otros dos hermanos, conocerá a un hombre que le hará creer en la última palabra que su padre le susurró al oído antes de morir.
Este género no suele gustarme mucho pero la autora crea muy bien los personajes, los escenarios y la atmósfera que engloba la historia.
Las novelas de Megan Maxwell son libros de "no pensar", simplemente lo lees y te sumerges en la historia sin hacer ningún esfuerzo por entender lo que te pretende contar ya que la autora tiene una forma de narrar muy sencilla (y con el calor que está haciendo, se agradece).
La trama gira en torno a Sharon y su hermana. Sharon es una abogada que trabaja en el bufete de su padre. Su marido parece ser su media naranja. Tienen los mismos principios y valores, siendo su trabajo lo más importante para ambos.
Ambos viven felizmente su vida hasta que ocurre una tragedia en la vida de Sharon. Desde este momento, la novela va cogiendo fuerza ya que vemos en Sharon cierta humanidad y garra que no tenía al principio. A su vez, Sharon descubre que tiene una hermana gemela y no descansará hasta encontrarla.
Como subtrama, el padre de su marido intentará hundir su vida de por diferentes razones.
Esta novela tiene una dosis de intriga y misterio que no he visto en otras historias de la autora, elemento que favorece la lectura.
Con un ritmo ágil, una narrativa sencilla y unos personajes bien creados, Megan Maxwel nos habla de amor, venganza, odio, amistad... humanizando la feminidad.
Historia agradable a la par que dramática, recomendable para leerla en momentos de tranquilidad, tras lecturas densas.
Puntuación: 6
Gracias a ESENCIA por el envío del ejemplar.
Hola! No conocía el libro pero no tiene mala pinta así que me lo apunto. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
Últimamente Megan siempre escribe igual. Este lo tengo descartadísimo.
ResponderEliminarUn beso ^^
¡Hola! Pues este a mí me gustó bastante, es cierto que no es una maravilla pero me pareció bastante entretenido. Un besote :)
ResponderEliminarNo es lo que suelo leer, así que esta vez lo voy a dejar pasar.
ResponderEliminarBesotes!!!